8 ideas para crear un cuarto de dormir más ecológico

Para quien no prescinde de un estilo de vida el más amigo del ambiente posible, hacer la casa más ecológica es tan importante como el reciclaje. En la división que se quiere lo más tranquilo posible – el dormitorio – hay varias ideas a poner en práctica para transformarlo en un santuario más verde.

1. Colchón. La base de una buena noche de sueño está en el colchón que, además de ser cómodo, también puede ser ecológico – basta optar por modelos confeccionados a base de látex natural, lana, algodón orgánico o melamina. Si no es posible cambiar de colchón, invierte en un resguardo de colchón orgánico e hipoalergénico.

2. Cojines. Colocar la cabeza en una almohadilla orgánica es un gesto reconfortante y amigo de ambiente – opte por cojines ecológicos, o sea, cojines en algodón o lana orgánica. Los cojines cuyo relleno es a base de látex natural o de trigo sarraceno también son una buena opción. Además, es importante ventilar periódicamente los cojines de la cama, preferiblemente al sol.

3. Ropa de cama. A la hora de abastecer la cama con sábanas, mantas, mantas y edredones, busque las etiquetas que denuncian productos 100% naturales, o sea, confeccionados con fibras orgánicas. En verano, la opción debe recaer sobre las sábanas de lino o de algodón orgánico y, en invierno, sábanas de franela orgánicas. En materia de mantas y edredones, la elección también debe recaer sobre los modelos en lana orgánica (más caros, pero duraderos) o, alternativamente, los modelos en algodón orgánico. Evite todo lo que tenga poliéster (están confeccionados con fibras a base de petróleo) y la seda pura, ya que ésta requiere una limpieza en seco, un proceso muy tóxico.

4. Otros textiles. Quien dice la ropa de la cama, dice también los restantes textiles que contribuyen a la decoración y la acogida de un dormitorio. También las cortinas, estores y alfombras pueden ser elegidos con un perfil ecológico – basta optar por materiales orgánicos y / o reciclados, caso del algodón, lana, lino y bambú; o aún fibras naturales como el sisal, las hierbas marinas o la fibra de coco.

5. Muebles. En lo que se refiere al mobiliario para un cuarto de dormir más respetuoso del medio ambiente, la elección debe recaer sobre piezas de madera maciza, evitando muebles con barniz y otros acabados del género, madera prensada y MDF (placa de fibra de madera de media densidad). ¿Por qué? Estos materiales contienen compuestos orgánicos volátiles (COV) que, además de comprometer la calidad del aire, están asociados a problemas respiratorios, dolores de cabeza, náuseas, irritación de los ojos y de la piel.

6. Iluminación. Por norma, el cuarto es un refugio nocturno, donde la iluminación artificial es imprescindible – cambie todas las lámparas tradicionales por lámparas ecológicas. Afortunadamente ya existen muchos modelos que emiten una luz suave y acogedora, perfecta para una decoración amiga del ambiente de la habitación. Si las velas forman parte de la iluminación de la habitación, asegúrese de que adquiere velas producidas a base de soja o cera de abeja – son más ecológicas, más sanas.

7. Paredes. Un cuarto más verde también pasa por tener paredes amigas del ambiente, lo que significa optar por pinturas ecológicas, preparadas a base de leche y biodegradables o, alternativamente, papel tapiz reciclado.

8. Calor y frío. El confort es todo en una habitación, sin embargo, hay que certificar que tiene ropa de cama adecuada para no recurrir excesivamente al calentamiento en invierno, y al aire acondicionado en verano. Además de ahorrar dinero, también ahorrará energía … y el planeta agradece!

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